En el sistema estático, una máquina hidráulica ubicada en el pozo de salida del tramo a renovar, empuja un sistema de barras de acero por el interior de la cañería existente, hasta llegar al pozo de entrada en el extremo opuesto, donde se instala el cabezal de expansión o cuchilla de corte, al cual se conecta el portatubo de acero donde se acopla el tubo de PEAD.
Con este sistema se pueden hacer sustituciones hasta DN 400 en tramos de hasta 200 m.
VENTAJAS
- Sistemas de trabajo con aperturas de pozos en una disminución superior al 85% respecto al sistema tradicional de zanja abierta.
- Acortamiento considerable en los tiempos de ejecución.
- Mínimo impacto ambiental.
- Mínimo de movimiento de suelos (menor cantidad de acopio de suelos, baja polución de polvo, disminución en la generación de barros en calzadas y veredas producto de eventos de lluvias).
- No produce hundimientos (en el sistema a zanja abierta es necesario verificar cuidadosamente la compactación de la zanja para evitar futuros hundimientos).
- Mínima intervención de vereda (solamente en conexiones domiciliarias, menores problemas con vecinos por la reparación de veredas).
- Mínima afectación de la circulación peatonal y vehicular (menores molestias a los vecinos).
- Restablecimiento del servicio en forma inmediata.
- Sin disminución de sección, inclusive posible incremento.
- Sin interrupción de suministro al usuario (se puede realizar un by pass en superficie en caso de complicaciones).
- Aplicable a todo tipo de cañería dañada incluso en zonas inexistentes y colapsadas.
- No requiere tratamiento alguno de la tubería existente.
- Adaptación a imponderables en la traza de cañería existente e interferencias.
- Las pendientes del terreno no presentan dificultades para el método.